La cinta “Las colonias” de Luis Lazalde nos acerca a la vida de los menonitas en Durango

Por Viviana Yolotzin Mendoza

Este martes 23 de mayo se presenta “Las colonias” dentro del Circuito de Exhibición Documental “Ambulante” del 22 al 28 de mayo. Además de este documental se contará con: “Mamá”, “Etnocidio: notas sobre el Mezquital”, “Queridos niños del futuro”, “Rebel Dread” y “Frutos del esfuerzo”

Todas las funciones se ofrecerán de manera gratuita en la Plaza Cultural Los Laureles (Av. Universidad y Av. División del Norte S/N). Para mayores informes en la página de facebook de la la Cineteca (@CintecaChihuahua).

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Ahí se puede ver el brevísimo avance de la cinta:

Los menonitas llegaron a México alrededor de los años veinte del siglo pasado, mayormente desde Rusia y Canadá. En la película explican que esta comunidad concreta se fue de Canadá por causa de cambios en el sistema educativo, y emigraron hacia el sur. La ganadería es central para su subsistencia, dedicándose esencialmente a la venta de productos lácteos.

Esa es una historia conocida en Chihuahua, pero Luis Lazalde, egresado de la carrera en Comercio Internacional del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey, realizó un diplomado en cinematografía en la Universidad de Guadalajara y la maestría en Cine Documental en la Escuela Nacional de Artes Cinematográficas de la UNAM. Se ha desempeñado como primer asistente de cámara, así como director de fotografía, trabajo en el que destacan la película “Flesh To Play” (2016) de Gamaliel de Santiago Ruvalcaba y el documental “Soneros Son” (2016) de Jorge Curioca. Incursionó como director con el documental “Las colonias” (2022), estreno mundial de la gira de documentales Ambulante 2022 porque tiene un importante lazo con esa historia. 

Eso es lo que explica en entrevistas para “Ambulante” y el “Diario de Querétaro”

Llegó a aquella historia movido por sus recuerdos de la infancia, pues su abuelo, quien trabajaba en la industria, fabricó un par de calderas para la comunidad y él “desde chico” los tenía “en la mira, a la vista. A estas personas tan peculiares, muy pero muy rubias a pesar de “ser” de México”.

En 2013 vuelvo a la comunidad menonita con el proyecto de la maestría en cine documental de la Universidad Nacional Autónoma de México y el acercamiento a la comunidad con el pretexto de buscar la caldera de mi abuelo y ver si aún estaba en funcionamiento. Descubrí que sí, la caldera sigue ahí y sigue funcionando en la fábrica de quesos, yo me quedé fascinado de cómo ellos conservan sus tradiciones y sus objetos de trabajo durante décadas, se detonó una curiosidad por conocer más de la comunidad y saber qué está pasando en la actualidad, todos sabemos que conforme entramos más y más al progreso, muchas costumbres se van perdiendo.

Al iniciar llegué con mi hijo, llegué con la cámara, pero también con la familia y el acercamiento fue de familia a familia con la forma que me recibieron. Fueron al menos 12 semanas de investigación y rodaje distribuidas en diferentes temporadas del año.

“Esta es una comunidad que vive en cierta resistencia, es una de las razones fundamentales que me hizo acercarme a ellos. Porque viven de una forma que muchos de nosotros quisiéramos vivir, hablando de las personas que vivimos en la ciudad, y que nos falta el campo y esa conexión con la naturaleza, […] A pesar de todo el tema religioso, es una comunidad en resistencia y es un punto que definitivamente quise tocar, la conservación de las cosas”.

En el mes de diciembre de 2022 la iniciativa se aprobó y se reformaron los artículos 4, 5, 14, 28 y 19 de la Constitución Política del Estado, cambio que representa para las personas integrantes de las comunidades menonitas el reconocimiento de derechos como la protección y promoción de sus conocimientos tradicionales y su patrimonio cultural, artístico, material e inmaterial.

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